El pasado sábado, 8 de junio, las letras del alfabeto escaparon de los libros y se dieron cita con niños y niñas en la carpa de actividades de la Feria del Libro de Zaragoza, situada este año en la Plaza del Pilar.
El escritor Sergio Lairla y la ilustradora Ana G. Lartitegui dinamizaron el taller «Letras mutantes», un taller destinado jugar con los tipos alfanuméricos para convertirlos en alguna otra cosa, como por ejemplo en espantapájaros, soldados, jirafas,… Porque en su origen, las letras del alfabeto no fueron otra cosa sino dibujos, algo que con el paso del tiempo hemos llegado a olvidar y que, precisamente, nos encargamos de resucitar con esta actividad.
Tras una breve introducción demostrativa sobre la evolución histórica de algunas de nuestras queridas letras tales como la «A», la «B», la «M» o la «O», los participantes asistieron a la transformación experimentada en determinadas palabras cuando alguna de sus letras se convierte en un dibujo sin dejar de ser letra. Así dicho parece un lío, pero resultó ser algo bastante divertido. ¿Por qué sino empieza por «M» la «Montaña»? ¿Por qué abre tanto la boca la «C» de «Comer»? ¿Acaso no es la «T» el «marTillo» del abecedario? (bueno, esto último es una famosa greguería de las de Ramón).
Todos los asistentes tuvieron la ocasión de poner a prueba su imaginación imprimiendo vida nueva a las letras del alfabeto. Tan animada se puso la cosa entre los jóvenes artistas que se lanzaron incluso a convertir las letras en «letratos», o sea, retratos. Acompañamos la noticia con un interesante reportaje gráfico.